Mientras conduzco en dirección al mar un pensamiento me obsesiona: mágico, magia, -las mejillas me arden- mágico, magia… Cuando la pena me puede busco el mar, solo el mar se lleva parte de mi tristeza y hoy la tristeza me cala los huesos.
Aparco el coche y bajo los escalones que me separan de la arena. Está anocheciendo, la luna es blanca. Hay un cielo de nubes grises y rosas. El viento golpea suave, frío. Una palmera corta el horizonte en vertical; a una pelota naranja, medio enterrada en un montículo de arena, le sale por toda su redondez una luz fluorescente y un niño, vestido de pies a cabeza de negro, voltea en el aire jugando con las sombras. Detrás del montículo, emerge de la nada, un enorme barco amarillo con seis contenedores de colores y grandes letras negras C A N A R I A S. Por un instante, palmera, montículo, pelota, niño, barco y mis ojos están perfectamente alineados bajo una luz oscura y rosa.
Las mejillas no arden, el barco se aleja, el viento es más frío, la noche es más noche, el mar se apaga, se calla, mi tristeza me moja…hoy el mar no quiere mi pena. La pena de no tenerte amor, de no tenerte.
Aparco el coche y bajo los escalones que me separan de la arena. Está anocheciendo, la luna es blanca. Hay un cielo de nubes grises y rosas. El viento golpea suave, frío. Una palmera corta el horizonte en vertical; a una pelota naranja, medio enterrada en un montículo de arena, le sale por toda su redondez una luz fluorescente y un niño, vestido de pies a cabeza de negro, voltea en el aire jugando con las sombras. Detrás del montículo, emerge de la nada, un enorme barco amarillo con seis contenedores de colores y grandes letras negras C A N A R I A S. Por un instante, palmera, montículo, pelota, niño, barco y mis ojos están perfectamente alineados bajo una luz oscura y rosa.
Las mejillas no arden, el barco se aleja, el viento es más frío, la noche es más noche, el mar se apaga, se calla, mi tristeza me moja…hoy el mar no quiere mi pena. La pena de no tenerte amor, de no tenerte.
8 comentarios:
Esta vez tus hermosas palabras son imagen absoluta,visualidad plena.
Es contradictorio decirte que tu pena es maravillosamente mágica?
Y ya nos lo dijo Serrat..."y si te toca llorar/es mejor frente al mar".
Un gran beso, Lunita.
Pues si que es mágico, me encantó cómo describiste la escena, llegué hasta sentir la brisa del crepúsculo con esos tintes rosas...
Precioso y emocionante, y puro, como los pechos de Selene.
Un abrazo Luna, Lunera, cascabelera...
Lo estoy viendo Luna, sabes que lo estoy viendo.............y también lo noto, sí lo noto y en el paladar siento la sal conocida de una gota que resbala. Besos
Ay Lunita, que hermosas palabras.
Tu pena no es amarga, tiene el sabor del azucar.
Tus pesares son tan bellos que dan ganas de compartirlos leyéndote una y otra vez.
Que tengas un buen año
marejada de besos
Javi.--
Si el amor no quiere tu pena...¿Qué le hiciste? Yo siempre que estoy triste y miro al mar, siento un profundo consuelo de pensar..que todo fluye, aunque venga y se vaya...
Precioso relato
besos
Es una película, es como un recuerdo, como si nos hubiese sucedido a nosotros y pudiéramos volver allí, a la arena, al mar, al niño, a los colores. Al aroma a sal.
Si el mar no se lleva tu dolor, la sal, al menos, curará tus heridas.
Besos Luna.
es verdad se llega a escuchar el sonido de las olas en la rompiente y que bueno poder sentir la brisa.
la combinación perfecta a mi gusto es el mar y una noche de luna muy muy clara,el resto lo puedo regalar a quien lo quiera.
que lindo lo que escribiste porque a pesar de tener tristeza está lleno de sentimiento y eso es bueno.
y en otro tema distinto( a mi también me gusta muchisimo el gran Silvio).
un saludo luna ( nombre maravilloso si los hay).
Gracias Luna por la magia y las palabras.
Saludos.
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