El viento llama a mi vientre,
a mi suave vientre,
a mi alado vientre.
Desnudo mi cuerpo al viento,
me toca,
frío aliento de unos labios,
muerte de besos en mi cálido vientre.
Porque a veces no aguanto la vida,
la piel queda quieta,
el corazón vacío,
los sueños se doblan y
los pájaros no anidan en mi cabeza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario